viernes, 30 de enero de 2009

Los sinsabores de la pasión

Mezclar placeres no resulta muy buena elección, terminan opacándose entre ellos y volviéndose menos agradables. Mezclar placeres con otras aficiones que no entran en esa categoría es aún peor. La música es definitivamente una de mis mayores pasiones, eso lo saben todas las personas que creen conocerme, y no tanto el escucharla que es un comportamiento propio de cualquier ser que tenga sangre corriéndole a torrentes. El placer lo encuentro también en el hecho de poder “blandir” un instrumento y, así sea desafinadamente, con problemas técnicos y demás, volverlo un amplificador del corazón. No se si la política, como tema que se encuentra dentro de los que me interesan pueda calificarse como una pasión, más bien me parece un vicio necesario.

Cuando los sinsabores de la política se mezclan con lo sublime de la música, siento ganas de gritar, de quejarme, siento que mi pasión de nuevo ha sido prostituída.

Hoy volvió a comenzar actividades musicales la Banda Sinfónica de Barbosa, a la cual pertenezco, este he hecho por sí solo es muy bueno, no lo son tanto las circunstancias. Al señor Alcalde de mi municipio se le ocurrió confirmar a nuestro director ayer a eso de las 7 de la noche que hoy la banda debía encontrarse a primera hora en la Biblioteca Pública Isolda Echevarria Misas. El motivo, la visita del “señor” ministro de agricultura y desarrollo rural, Andrés Felipe Arias, o como muchos falazmente (eso espero) llamaban, “el futuro presidente de Colombia”. Después de casi cuarenta días de inactividad musical, sin tocar una boquilla, sin tener contacto directo con mi Eufonio me veo obligado junto con mis compañeros a recuperar sonido y embocadura en tiempo record para, en un fino acto de lambonería política de esos que abundan en nuestro país, tocar los himnos al respetadísimo Ministro y toda su concurrencia.

La verdad me gusta mucho tocar nuestros himnos, el anacrónico nacional pero sobre todo el himno antioqueño, con todas las quejas que uno pueda tener, me parece una melodía bastante bonita. Pero cuanto han tenido que sufrir nuestros “símbolos patrios” ante la historia política de nuestras tierras. La recomendación del Alcalde se hizo efectiva, pues a pesar de todos los inconvenientes pudimos “tocarle bien al futuro presidente”.

Este mundo esta lleno de putas, hermosas y putas Putas sin las cuales sería imposible vivir: la democracia, la justicia, la libertad, la música…

Esto por sí solo es irritante. Ahora el hecho de tener que andar detrás de un político casi mendigando me causa bastante furia. Tengo que reconocer con gusto que el señor Alcalde del municipio esta apostando mucho por la educación y la cultura, probablemente en actos populistas, pero con prometedoras perspectivas y buenos resultados parciales. Pero ¿Cuándo vamos a entender que los gobernantes –como dijera Jaime Garzón- son servidores del pueblo y no al revés? Son ellos quienes se deben a nosotros, la ciudadanía los elige mediante un émulo de democracia para que sean ellos quienes administren lo público, lo de todos y en beneficio de todos.

Recuerdo muy bien la satisfacción que me dio el 1 de enero de 2008, cuando viendo la posesión del gobernador de Antioquia, Luis Alfredo Ramos Botero escuche que como gran melómano que se declara iba a apoyar todas las manifestaciones musicales del departamento, de manera destacada las bandas municipales. Esto fue un alivio, ya que su proyecto político era oblicuo al del pasado gobernador Aníbal Gaviria, quien decididamente había apoyado la inversión en cultura creando y dando mucha fuerza a lo que hoy es Antioquia Vive la Música. Quienes de alguna manera pertenecemos a este mundo (el de las bandas (el de la música)) hemos evidenciado un recorte presupuestal para la puesta en marcha del festival, sin embargo sigue realizándose con éxito llenando de acordes la cotidianidad de muchos municipios de la resquebrajada geografía antioqueña.

Ira fue lo único que pude sentir cuando hoy me comentaron la manera como está funcionando la actual administración departamental en este tema. Anteriormente la dotación instrumental dada por la Gobernación a los municipios era por grupos, garantizando así que por lo menos la mayoría se vieran beneficiados cada cierta cantidad de tiempo. El señor Gobernador decidió (impuso) al encargado del plan departamental parar la dotación para este año porque –como me contaron- “él no le iba a mandar instrumentos a municipios que no lo habían apoyado en campaña”. Efectivamente, millonadas de instrumentos se encuentran en este momento represadas en las oficinas del Palacio de la Cultura Rafael Uribe Uribe esperando a que el gobernador personalmente decida quien los va a recibir. El Alcalde de Barbosa es una de las “ñañas” del Gobernador y solo bastaron una llamada y una lista para recibir un primer Si, ahora sólo esperamos que de el si definitivo y que además decida que nos manda.

Debo reconocer que de llegar ese instrumental me pondré muy contento, es muy necesario para las expectativas que tenemos como grupo a mediano plazo. Sin embargo me queda el sinsabor de saber que son producto de un nuevo “roscograma” y que lo que nosotros recibamos va a dejar de llegar a municipios que seguramente los necesitan más y tienen menos posibilidades que nuestra administración.

Pregunto yo desde la ignorancia de mis 17 años ¿El señor Luis Alfredo Ramos es gobernador de Antioquia, es decir, de todos los antioqueños (entre ellos yo y muchas otras personas que no están completamente de acuerdo con su gobierno) o sólo de aquellos que le son ideológicamente afines? ¿A qué juega entonces aquello que nos dignamos llamar democracia? ¿Democracia para quien?

Sumémosle a esto el hecho de que la escuela a la cual pertenezco se llama “Escuela de Música Alberto Uribe Sierra”. Para quienes no sepan este es el nombre del padre del presidente de la república Álvaro Uribe Vélez. No me declaro inconforme porque sienta amores u odios hacia estos personajes, sencillamente porque somos una entidad cultural, pública, y por ende abierta y, no se si este bien decirlo, apolítica.

Puedo dejar atrás pensamientos, renovar día tras día mis ideales, formar pensamientos y disentir frente a muchas cosas con las cuales no estoy de acuerdo pero que me veo obligado a decir, pero serán obligaciones que aceptaré con gusto mientras pueda estar siempre en un mundo que amo, el de la música y el de las bandas. me prostituiré cuanto sea necesario y por lo pronto no haré más que seguir escribiendo sobre los sinsabores de mis pasiones.



viernes, 23 de enero de 2009

De Amores Contrariados

Pero más allá de los libros, los amores están aquí, rondando corazones solitarios, como tentándolos con manjares de los que nunca les darán a probar.

A ella(s)


El libro de Cortázar en la cama, no me animo a cogerlo y Andrés Fava me perdone. No es una de esas noches en las que me quiera aventurar a tratar fallidamente de descifrar sus locuras. Y me preguntan la razón para amañarme tanto al frente de este aparato, con dolor he de responder eso de lo que hace tanto rato soy conciente.

Los abuelos vivían y contaban historias de amores de papel, ahora puedo contar historias de desamores digitales. La televisión me parece cada vez mas vacía, y el vacío con vacío no se llena ¿Qué me queda? Este mágico aparato, aquí puedo encontrar lo que quiera, sobre todo gente. La gente con la que no me veo, la que me quiere y la que probablemente no, a la que le intereso y le sirvo, para la que un “no admitido” no debe estar de más. Pero conforme avanza la noche, las sesiones se van cerrando y yo, como de costumbre casi solo voy quedando.

Si el computador pudiera dar cervezas, en el acta de defunción mía y de varios amigos aparecería sin duda alguna “cirrosis”. Pero como no se puede no queda más que reemplazarlo con palabras.

Los recuerdos, siempre, en Agosto sin embargo. Suspiros por doquier, y no las merezco, no las he ganado. La vida es extraña, y aunque no este revelando ningún gran misterio al decirlo, así es. Nunca se termina de comprender, y no se hasta que punto sea para comprenderla. Creo en el hombre, en lo que puede hacer y deshacer, en lo que puede querer y lograr, sin embargo no creo en las fuerzas que actúan sobre él. Innegables son sin embargo las casualidades.

A una la ame, locamente, hasta llorar, hasta aprender. La ame tanto como puede amar uno a la primera. Las decisiones y los rumbos fueron tomando distintas direcciones. La distancia entonces vino y aunque tratamos de luchar contra ella mucho me faltó ser hombre para no dejarme vencer, caí, perdí.

En la distancia la conocí a ella, una ventana era nuestra apariencia y fueron primero las palabras que las impresiones. Primero nos leímos y luego nos hablamos, no era lo acostumbrado, pero fue lo apropiado ya que útiles resultaron nuestras máscaras. Al verla por primera vez seguro sentimos que ya antes habíamos estado uno frente al otro, ahora si era lugar para las impresiones. Luego, de nuevo con ventanas como marco, me di cuenta de que la máscara había funcionado, y no la digital sino la que creemos que es la de verdad. Antes los kilómetros habían terminado una, ahora no permitían que otra empezara. El tiempo pasa, y como suele hacerlo entonces pasó. Su vida siguió, ¿Qué más esperaba? El amor varias veces encontró, o por lo menos varios émulos de él. Tanto cariño, amor mal agradecido, sencillamente me lo merezco.

Nunca me ha querido y no se si la quiera, sin embargo de mi pensamiento se adueña, todo el día a toda hora. Sólo un rostro bonito, una personalidad arrolladora. Hermoso cabello, piel morena. Sea curiosidad y masoquismo las ganas de ahogarme en esos profundos ojos cafés y, después de contemplarlos sin vergüenza morir en sus labios. No los quiero pero los deseo, aunque estoy seguro de que antes de saciarme me podría enamorar. Pero ¿Qué importa lo que sea ella para mí si no soy nada para ella? Un contacto más, un nombre y dos corcheas que también lejos están.
¿En común? Mi corazón y mis pensamientos. Completamente distintas, son la salsa, el reggae y la clásica. Estúpida comparación, pero necesaria. Dos de ellas aman la música tanto o más que yo, quizás la otra también, bueno tener un amor en común. Ninguna se conoce, yo creo conocerlas, no por igual. Son del mismo mes, Agosto, ya no se ni que será…buena o mala suerte, vas ganando mala y nada que hacer. Ah, y como olvidar, tienen en común algo a su favor, todas están lejos de mi, muchos kilómetros y asfalto las bendicen.

Dulce sabor a derrota, amargo a retirada. Me voy de nuevo, con el corazón partido y la cáscara de huevo no funciona. La silueta verde pronto se irá también como yo de sus corazones he salido (o nunca he entrado). Mientras sigo pensando y llorando, queridos amores contrariados.

martes, 20 de enero de 2009

A Medellín se le acaba la eterna primavera



(Artículo presentado como trabajo final para la materia Reporteria y Redacción de Noticias I)

Por Juan David López Morales



Cada vez menos agradable para vivir se erige la ciudad de Medellín, marcada históricamente por la violencia se ha caracterizado por ser foco del desarrollo nacional. Hoy cuando para muchos la violencia ha desaparecido, el llamado desarrollo se la ha tomado volviéndola un hervidero de humo y hollín ¿la causa? Para nadie es un secreto que Medellín atraviesa en este momento por una gran problemática ambiental y que uno de los recursos más afectados es el aire.

Muchos informes se han hecho en los últimos años, de todos los lados: organizaciones independientes, organizaciones gubernamentales, universidades. El resultado nunca es alentador y, aunque se presentan fluctuaciones siempre es negativo.

Actualmente Medellín esta situada por encima de ciudades que tradicionalmente han sido conocidas por sus altos índices de contaminación como Ciudad de México o Sao Paulo, convirtiéndose así en una de las ciudades más afectadas por este fenómeno en Latinoamérica. En el 2005 por ejemplo, la ciudad tenía un índice de partículas contaminadas por millón (ipcm) de 93, sin embargo este es un número que no nos dice nada a menos que tengamos en cuenta que el de Bogotá estaba en 64, el de Ciudad de México en 66 y que la meta nacional esta en 60 partes por millón. Con los años la situación no ha cambiado y si bien presenta altibajos no deja de ser preocupante.

La calidad del aire en Medellín es un tema que preocupa, por tal razón funciona desde el 17 de julio de 1992 la red de monitoreo de la calidad del aire del Valle de Aburra REDAIRE que por medio de un convenio de cooperación interinstitucional agrupa las acciones de El Área Metropolitana del Valle de Aburra, Corantioquia, Universidad Nacional de Colombia – Sede Medellín, Universidad de Antioquia, Universidad de Medellín, Politécnico colombiano Jaime Isaza Cadavid, y de manera más reciente CORNARE, el IDEAM y la secretaria de medio ambiente del municipio de Medellín. Este es el encargado de revisar por medio de estaciones de monitoreo ubicadas a lo largo de todos los municipios del Valle de Aburra como marcha la calidad de aire. Gracias a los estudios que periódicamente hace REDAIRE es que es posible tener una dimensión clara del fenómeno, sin embargo, a pesar que dentro de sus funciones se encuentra la de “publicación de los boletines informativos trimestrales con los resultados de la monitoria de calidad del aire y con los artículos presentados por los investigadores sobre el tema de la calidad del aire” (
http://www.unalmed.edu.co/redaire/que_es.html) el último boletín que existe es número 17 de junio de 2005, es decir,, desde hace tres años y medio no hay boletín, y aunque todos los informes desarrollados se pueden encontrar en la página principal (http://www.unalmed.edu.co/redaire), allí también el último boletín que aparece es el número 17.

El fenómeno de contaminación atmosférica en Medellín es heterogéneo en causas, en características y por supuesto en consecuencias.

Las causas varían desde las emisiones generadas por las fuentes móviles, es decir vehículos de todo tipo; fuentes fijas que son todo el sector industrial y fuentes de otro tipo como las construcciones o las canchas de arena. Las fuentes móviles aportan cerca de un 66% de contaminación, las móviles un 30% y el resto corresponde a las otras.

“El diesel que se consume en Medellín y que se compra a ECOPETROL, produce 4500 partes por millón (ppm) de derivados de azufre. A raíz del debate que se hizo, el municipio de Medellín firmo un pacto de un aire mejor con ECOPETROL y este se comprometió a ir rebajando esas partes por millón y a lo mejor lo rebajaron, pero si se tiene en cuenta que en Europa el diesel que se consume tiene menos de 30 ppm de derivados de azufre y aquí esta por los 4000, es una cifra aterradora. No solo eso sino que la gasolina de aquí tampoco es buena, se le echan adictivos para mejorar el octanaje y también tiene componentes que no son muy saludables para el medio ambiente, el exhosto de los carros expele una cantidad de contaminantes que son nocivos para la salud”, todo esto lo dice Julio Jiménez Zuluaga, ingeniero de la facultad de Minas de la Universidad Nacional, refiriéndose con indignación e impotencia a una de las principales causas de la baja calidad del aire que respiran los medellinenses. De este mismo convenio entre ECOPETROL y la Alcaldía de Medellín habla Carlos Arturo Bozón Pérez, coordinador del programa de producción mas limpia de la secretaria de medio ambiente de la Alcaldía de Medellín, a cargo del programa Medellín cuida su aire, quien dice que “permite reducir ese contenido de azufre que en la actualidad ya esta en 2500. El último reporte de ECOPETROL del 9 de diciembre dice que el contenido de azufre del diesel de Medellín esta en 2449,44 ppm, esto es producto del acuerdo y el convenio firmado, donde se establecieron unas tareas que debe hacer ECOPETROL para mejorar el diesel, al 2010 en 50 ppm de manera gradual, o sea que ha venido cumpliendo con los compromisos”, pero Jiménez dice que estos cambios deberían ser ya, puesto que los efectos de la contaminación no son directos y todo el material que quede en el aire mientras tanto seguirá contaminando después.

Bozón Pérez señala que las circunstancias de emisión de contaminantes no son tan graves en Medellín pero se hacen más críticas debido a su ubicación topográfica y a sus circunstancias climatológicas. Medellín se encuentra ubicado en un valle cerrado donde los vientos corren a velocidades muy lentas, razón por la cual la contaminación tiende a concentrarse sobre todo en las zonas urbanas. Sumado a esto existe un fenómeno llamado inversión térmica que consiste en que el aire frío que baja en las mañanas por las laderas atrapa los contaminantes del aire y “la gente que madruga a hacer ejercicios lo que hace es chuparse toda esa contaminación” dice Jiménez. Al calentarse este aire durante el día, cuando se supone que es más liviano, no sube con facilidad debido a toda la carga que tiene. Éstas circunstancias especiales que en un tiempo le dieran el apelativo de “ciudad de la eterna primavera” por su microclima, son hoy un agravante para el problema atmosférico.

Nelson Ramírez, vendedor de mangos de piel morena, cercano a los 50 años y que trabaja hace aproximadamente doce en la carrera 44 (San Juan) cerca de la estación del metro Alpujarra, dice que “definitivamente esta es una de las más contaminadas, el humo es mucho y sobre todo el ruido”. Para Bozón, la calidad del aire de Medellín es aceptable basándose en el índice anual, es decir, los promedios, pero señala también que la ciudad tiene lugares y horas críticos. La carrera San Juan es en varios puntos uno de esos junto con otros como el centro de la ciudad, la calle Barranquilla cerca de la Universidad de Antioquia, la carrera 80 cerca de la facultad de minas de la UNAL, varios sectores en la zona de El Poblado, entre muchos otros.

Las horas críticas para el aire de Medellín son aquellas en las que la mayoría de gente se moviliza desde su casa hasta su sitio de trabajo o estudio y viceversa, es decir, aproximadamente entre las 7 y 9 de la mañana y entre las 5 y 8 de la noche. Igualmente, según los estudios realizados por REDAIRE durante todos estos años, los índices de contaminación en el Valle de Aburra suben en épocas de intensa actividad laboral, siendo entonces los meses de vacaciones los que menores índices de contaminación presentan.

Para Secretaria de Medio Ambiente, la calidad del aire de Medellín no es crítica, ya que al promediar horas, días y meses no alcanza niveles muy altos. Sin embargo esos episodios en que la curva de contaminación es alta pueden llegar a ser muy nocivos para la salud de las personas: “No obstante los resultados positivos en cuanto a la cobertura algunos indicadores como las muertes en menores de cinco años por enfermedad respiratoria aguda mostraron aumentos importantes durante el período entre 2004 y 2007 con un aumento superior al 50%. En cuanto al aumento de la mortalidad en menores de cinco años por enfermedades son indiscutibles los efectos nocivos que sobre la salud tiene la mala calidad del aire en la ciudad” lee el ingeniero Zuluaga en “Medellín como vamos”, publicación patrocinada por Corantioquia, Cámara de Comercio, El Colombiano, la Universidad Eafit y el Grupo Corona. Y es que la contaminación en el recurso aire no sería tan grave de no ser por los efectos que esta causa, no solo en los seres vivos sino en general en los ecosistemas.

Aunque, según dice Nelson, el llevar tantos años trabajando cerca del centro administrativo La Alpujarra y de la carrera 44 no le ha representado nunca problemas en su salud, Jiménez afirma que los efectos en la salud son esparcidos por toda la ciudad y que no hay un efecto directo que la gente pueda percibir sino molestias de todo tipo, en los ojos, en la respiración sobre todo de la gente que esta en edad critica como los ancianos y los niños pequeños, la gente que tiene asma, la que sufre de rinitis, pero casi nadie encuentra directamente la consecuencia de la gran contaminación en la salud de las personas.

Desde la Alcaldía se han hecho estudios que han reafirmado la relación directa que hay entre la contaminación atmosférica y las enfermedades sobre todo cardio-respiratorias. El último se realizó en el Guayabal, sector que además de tener una gran movilidad vehicular presenta el corredor con mayor ubicación de industria. Guayabal presenta unas condiciones en las que se genera alta contaminación. Se evaluaron el aire y las condiciones de salud de la población, además se hizo la comparación con el sector de Robledo-Bello Horizonte, una zona en la que no hay fábricas. Esta comparación evidenció que las personas que viven en Guayabal son 3 veces más propensas a contraer afecciones respiratorias que las que viven en Bello Horizonte.

“Las consecuencias de un aire tan contaminado en la salud de la ciudadanía es muy grande y el costo de la salud es muy grande, es decir, lo que tiene que pagar el estado por toda la cantidad de gente que acude a los centros de salud víctima de la contaminación ambiental es altísima” asevera Julio Jiménez. El problema de contaminación en el aire afecta a todos los seres vivos, a los ecosistemas y llega incluso a ser un problema para las administraciones públicas que son entonces las responsables de emprender acciones para parar y contrarrestar tanto las causas como los efectos del detrimento de la calidad del aire.

En el 2007 se firmó un pacto por la calidad del aire en el que se invito a todos los gremios implicados, es decir, transporte, industria, construcción, a firmar un pacto en el que se comprometían a reducir la contaminación del oxígeno en un 10% en un período de cinco años. Dentro de ese pacto cada uno tenía unas metas para cumplir. Por ejemplo el sector de transporte de carga y de pasajeros que son los que usan el diesel como combustible, adelantan programas buscan minimizar el uso de éste y reducir la generación de residuos, mejorar técnicamente sus vehículos, modernizar el parque automotor y prestar un servicio más eficiente de transporte a pasajeros. Con estas medidas se pretende empezar a reducir sus niveles de contaminación y sus emisiones.

Es un reto tanto para las empresas como para el Área Metropolitana el llamado proceso de chatarrización. Este comenzó en el año 2008 y busca sacar de circulación y reemplazar aquellos vehículos que se consideran ineficientes debido a su antigüedad y que por tanto generan más contaminantes y más ruido, sin embargo el año pasado solo se sacaron de circulación 4 buses. Carlos Arturo indica que por cada 1200 pesos que paga un pasajero al subirse a un bus, 17 deben ir para el fondo de chatarrización, esos recursos son recaudados por los transportadores, “quienes tienen el compromiso de tomarlos y llevarlos a una fidurcia para que el Área Metropolitana los recoja y pueda llevar el proceso a cabo”. Aún se encuentran analizando el número de vehículos que cada una de las 45 empresas de la ciudad debe reemplazar. La meta es sacar 100 buses más para este primer semestre.

El sector industrial por otro lado apunta a la implementación de programas de producción más limpia por medio del ahorro de energía, ahorro de materia prima, la búsqueda de materias primas y tecnologías más eficientes. Todas estas acciones de la mano de la administración municipal en pro de disminuir las emisiones, mejorar la calidad del aire en la ciudad y así mismo la calidad de vida de la ciudadanía.

Existe también un programa de control y vigilancia que adelantan Corantioquia, Área Metropolitana, Secretaria de Transportes y Tránsito de Medellín y Secretaria de Medio Ambiente. Consiste en que las unidades móviles a disposición de estas entidades sean equipadas para salir por las carreteras y hacer operativos para verificar que los vehículos cumplan con los estándares de emisión.

La autoridad ambiental con competencia directa sobre Medellín es el Área Metropolitana, es por esto que desde la Secretaria de Medio Ambiente no se emprenden acciones directas. En la secretaria se desarrollan campañas educativas buscando que la ciudadanía, en especial aquellas personas que están directamente implicadas como propietarios de vehículos o de industrias, sean concientes de su responsabilidad en la búsqueda del mejoramiento de la calidad del aire y así poder apoyar las actividades de control ejercidas por las autoridades competentes.

Julio Jiménez llama la atención acerca del hecho de que el director de la autoridad ambiental, es decir, del Área Metropolitana sea nombrado por el alcalde del mayor municipio, Medellín. “Llega a hacer unas cosas que a nosotros nos parecen aberrantes que es gastarse la plata de la sobre tasa ambiental, que debía aplicarse plenamente en mejorar el medio ambiente en hacer obras que destruyen los bosques, los parques y los árboles que son los que medio mitigan tanta contaminación”. Dice también que este organismo, al depender directamente de la Alcaldía municipal no ejerce pleno control sobre las acciones que ésta lleva a cabo. Las autoridades ambientales, según dice Bozón, están controladas por la Contraloría General de Medellín, para la cual según el informe del año 2007, la administración se encuentra aún “rajada” en el tema ambiental. Aún así se espera que el informe de 2008 muestre mejores balances que ratifiquen la efectividad de las acciones que hasta ahora se han puesto en marcha.

Uno de los temas que más controversia despertó en materia ambiental el año pasado y en lo que va de este es el sistema de transporte Metroplús. Con la decisión tomada por la Alcaldía de hacerlo a gas y no eléctrico como muchos esperaban las voces de inconformidad no se hicieron esperar.

Como indica Bozón Pérez, la Alcaldía evaluó el recorrido de Metroplús eléctrico y a gas, se evaluaron todas las variables, económica, ambiental, social, infraestructura, y la que sacó el mejor puntaje fue la de gas “entonces no es una decisión sacada de los bolsillos sino que es una decisión técnica tomada con base en los estudios”. Afirma que aunque el eléctrico no contamina, la diferencia entre este y el motor a gas en cuestiones ambientales es mínima, que el impacto ambiental se produce es en la zona donde es generada la energía. A pesar de esto, Jiménez asegura que no es tan cierto que los efectos del gas sean insignificantes, que por el contrario estudios de la Universidad Pontificia Bolivariana demuestran que el material particulado generado por el gas es de menor tamaño y que por esto llega más directamente a las vías respiratorias. En cuanto a los costos, Jiménez asegura que aunque en un principio los métodos eléctricos son más costosos, es una mejor inversión a largo plazo teniendo en cuenta que hay que reemplazarlos con menos frecuencia que los motores a gas y que el mantenimiento es más barato y ya se puede hacer en el país.

Bozón dice también que el alcalde Alonso Salazar, teniendo en cuenta los llamados de la comunidad ha dicho que el recorrido de Metroplús sea eléctrico por algunos corredores, es decir, en aquellos barrios que tienen calles pequeñas y en los que se dificultan grandes obras de infraestructura serán los motores a gas los que funcionen, pero a largo plazo se irán integrando rutas eléctricas.

Con el Metroplús se espera que salgan de circulación muchos de los vehículos de transporte público de la ciudad, ayudando así también a bajar los índices de emisiones de contaminantes.

El tema ambiental se convierte cada vez más en un tema de agenda pública. Es así como surgen grupos independientes que sirven como veedores de la calidad ambiental en la ciudad.

El Colectivo Ambiental de Antioquia surgió hace alrededor de dos años y medio a raíz de varias demandas que se han hecho frente a las acciones de la administración municipal, en ciertas obras, particulares y públicas. El Colectivo ambiental es la unión de varias personas que se dieron cuenta de que actuando juntos podían producir mejores resultados y sus demandas podían ser mejor atendidas. Julio Jiménez Zuluaga hace parte de este colectivo y aunque dice que no tienen un organigrama definido, él cumple sobre todo las funciones de comunicador. La difusión se hace mediante artículos que algunos medios como El Colombiano publican, pero sobre todo por medio de un sitio en Internet (
http://colectivoambiental.wordpress.com).

Profesionales de varias áreas conforman el Colectivo: abogados, periodistas, ingenieros. Además esta constituido como un grupo totalmente independiente. Tienen registro ante la personería como voceros y veedores del medio ambiente, esto hace que sus acciones tengan cierto valor y legitimidad, aunque según Julio Jiménez siempre actúan con responsabilidad y basados en las leyes. “No pertenecemos a nada, queremos ser plenamente independientes, no nos afiliamos a ningún partido político como colectivo para no vernos comprometidos posteriormente y no tener dificultades para promover acciones en contra de estas administraciones”. Dicen estar muy informados acerca de toda la problemática ambiental de la ciudad y en general del departamento y del país y acuden ante las autoridades ambientales que son quienes los deben apoyar, Área Metropolitana y Corantioquia.

Con el crecimiento demográfico y urbanístico de la ciudad es probable que el tema de contaminación siga vigente durante muchos años de manera preocupante, sin embargo el hecho de mantenerlo en la agenda ayudará a que se vayan dando soluciones.

“Aquí se ha considerado que el medio ambiente lo que hace es poner escollas al desarrollo, entonces lo que hay es una desarrollismo a ultranza por encima de lo que sea y aquí lo que muestran es eso, avenidas inmensas, y las muestran en fotos y la gente dice: ¡que maravilla!, pero a la gente se le olvida que acabaron con un bosque inmenso” dice Julio Jiménez apuntando a algo en lo que la mayoría están de acuerdo. El tema de contaminación, no solo atmosférica, también en las aguas, el suelo, etc. Alcanza dimensiones sociales, y es de vital importancia que quienes están directamente implicados, es decir, toda la ciudadanía tome conciencia de sus responsabilidades individuales y sobre todo de la importancia que tiene el medio ambiente y su buen estado como factor de desarrollo, de lo contrario a la llamada “tacita de plata” se le seguirá acabando su eterna primavera.












viernes, 9 de enero de 2009

De-ambulanzas

Suena el teléfono, como de costumbre no es para mi, me limito a pasarlo con resignación y desesperanza. Sigo entonces con mi rutina de no acabar, sentado al frente de una pantalla frívola buscando fantasmas invisibles que no aparecen y de cuya existencia dudo con frecuencia. Mi intranquilidad se ve de pronto interrumpida por “Para Elisa”, es inesperada pero me agrada escucharla, nunca se sabe cuando la necesite el alma. Con el correr de las notas no puedo evitar preguntarme ¿quién habrá sido Elisa? Tuvo que ser una mujer hermosa, malditamente hermosa, poseedora de una belleza de esas que no despampanan, que no brillan ni llaman la atención de todas las miradas, tuvo que ser una belleza de esas que hacen amar hasta doler, de esas que rompen hasta el corazón mas frío y oscuro. El piano sigue sonando y yo como de costumbre no encuentro que hacer, decido salir.

Es un poco tarde aunque la noche es aún joven. Cuando aún no se había manchado el cielo ya la luna estaba, era luna llena, pero ahora que si es de noche no la veo, se ha escondido. Hasta la luna le tiene miedo ahora a la noche, pero ¿cómo juzgarla? Ahora que ella se ha ido me siento un poco sólo, un poco más solo. Queda caminar, seguir caminando con el rumbo de siempre, ninguno, y con la esperanza de siempre, por lo menos poder regresar.

La calle nocturna y el mundo nocturno están llenos de olores, ¡que magnífica amalgama la que se combina con mi soledad!, es como beber un trago de ron con cenizas de cigarrillo, no es agradable pero termina siendo más efectivo para lo que se quiere, para embriagarse. Dudo de aquellas personas que beben sin intención de estar ebrios. El sabor del licor es como la soledad, nunca bueno, no se si es amargo, picante, insípido, pero es asquerosamente soportable. ¿Para que estar solos? ¿Solos? Es solo en plural, prefiero replantearme la pregunta ¿para que estar solo? Hay que estar solo a punto de borrachera, la soledad se busca. La diferencia con el licor es que esta no se le puede recibir a nadie, esta solo se puede beber sólo ¿redundante? No. Cuando se bebe es para escapar por un momento, para viajar como en sueños a nuevos estados en los mismos lugares, rara vez a nuevos lugares. Beber hasta emborracharse es tener la valentía de escapar como cobardes, de esconderse a pesar de estar rodeados y a pesar de saber que no se tiene escapatoria. Se bebe para olvidar, pero nunca funciona, agudiza la memoria que en otras circunstancias es inservible. Bueno, pero no salí a beber, sencillamente es un olor que difícilmente se puede separar del sopor de la noche.

Hace un frío sobrecogedor, menos mal tengo un suéter, no es más que otra llave de escape. Camino y mis pies se traban, se rozan. Que bueno sería que encontraran otro par de piernas que los acompañaran esta noche, que los hicieran sudar hasta el cansancio, pero eso probablemente no pasará. “Que linda blusa, creo que combina a la perfección con mis sabanas”. El sexo es un placer del que mi cuerpo hace rato no disfruta, por lo menos no como se debe. Veo que la pasión acumulada y las ganas de amar, cuando se han visto reprimidas no la van muy bien, continuamente siento como se disputan el control y el resultado siempre es el mismo: terminan mal heridas y agonizantes, sin ganas de seguir luchando y yo, quedo de nuevo a la deriva.

Creo que es mejor sentarme en aquella banca, la que en el día pertenece a la sonrisa de los niños y a la tranquilidad de los abuelos ahora pertenece a la tristeza de este hombre. Pocas veces soy capaz de llorar cuando quiero hacerlo, pocas veces las personas se dan cuenta de que algo en mi esta mal y pocas personas logran hacerlo. El llorar es sin duda una capacidad que les envidio a las mujeres, se me antoja bastante útil para caminar liviano. Sin embargo, no puedo explicar esta extraña sensación de placer al sentirme vacío, y como pasa siempre con lo placentero, quiero más. Es lugar dentro de mí para un mudo ¡Mierda! No puedo hacer más que respirar, acomodarme, recostar mi cabeza y mirar las estrellas, pero, tampoco hay estrellas, entonces mirar al infinito hasta que sea hora de despertar.

jueves, 8 de enero de 2009

El Malpensante, no apta para fundamentalistas

Cuando se tiene una mentalidad remotamente liberal y abierta, cuando se cree en la crítica como factor de cambio, cuando se tiene gusto por el buen humor y la exquisitez literaria, cuando se han dejado de lado todo tipo de tabúes; acercarse a un ejemplar de El Malpensante con mucho detenimiento puede convertirse en una experiencia completamente placentera.

El Malpensante es una revista literaria de la cual tengo el honor de decir que es orgullosamente colombiana, aunque creo que los colombianos promedio al conocerla no se sentirían tan orgullosos de pertenecer a la misma patria, y digo al conocerla porque estoy seguro de que la mayoría de gente en nuestro país no tiene la menor idea de que exista.

El Malpensante tiene una característica que para mí la hace muy especial: no está casada con ninguna ideología malgastada, rústica, anacrónica ni arcaica. Sencillamente es, si es posible decirlo ideológicamente “laica”, y esto requiere que sea completamente abierta a todos los puntos de vista posibles y salir en defensa de la libertad de expresión como creo que lo es.

En Colombia, es triste pero también necesario afirmar que la educación es un privilegio, más triste y más necesario es decir que en muchas ocasiones se encuentra mejor educación, mejor información y mejor criterio (si es que el criterio se puede calificar así) en espacios no tradicionales. Definitivamente antes de leer historia patria, de leer periódicos como El Colombiano o de acercarse a programas como Séptimo día prefiero “gastar” todo el tiempo que sea necesario frente a una pantalla leyendo el último ejemplar que haya en la Web. Es sin lugar a dudas mucho más instructivo, además de que despierta pensamientos nuevos, placeres, sentimientos y pasiones.

Pero ¿Porqué leer El Malpensante en la Web y no acceder mejor a un ejemplar para leerlo con más calma y comodidad? Porque como ya dije todo lo que es educación y dicho sea de paso, cultura, es un privilegio al que no todas las personas pueden acceder. De haber sabido dónde se consigue y cuanto cuesta la habría comprado sin ningún tipo de remordimiento, pero mi lejanía con estos medios (involuntaria) y mi consecuente ignorancia no me permitieron hacerlo para escribir este texto.

La edición que leí fue la de noviembre ya que es la última que aparece en la página (
www.elmalpensante.com). Varias impresiones puedo sacar de ésta lectura:

Para publicar en este tipo de revistas es completamente necesario tener un estilo agudo o por lo menos muy original, además de escribir bien, ¡ojo! No estoy hablando de hacer buenas redacciones, hablo de buenos textos, de aquellos que atrapan al lector mas despistado, que lo sobrecogen durante y después de la lectura y que además lo llevan a releer una y otra vez encontrando cada vez mas cosas.

En esta edición se lanza una sección llamada Margaritas, tomada de una revista argentina en la cual dos personas (Andrés Burgos y Martín Franco en este caso) escriben lo que quieran sobre lo que quieran, es decir, básicamente es una sección de opinión, de libre opinión.

Los artículos publicados en El Malpensante, dado su carácter de revista literaria, no tienen la característica de ser noticiosos, sin embargo sí son temas de interés público: política, cultura, actualidad, etc. Desde las historias de una cárcel medellinense hasta el conflicto histórico de Milan Kundera, pasando por opiniones sobre el controversial tema de la universidad pública y la insurgencia que tanta tinta gasto en el año terminado, y pasando también por ensayos sobre religión y ciencia o sobre ajedrez.

Es difícil intentar sistematizar por contenidos, por géneros o por temas El Malpensante. Esta revista es una completa amalgama llena de opciones que quizás no son para todos los gustos pero si para muchos: cuentos, ensayos, crónicas, notas de opinión, etc. Lo cierto es que en la mayoría de los casos se puede encontrar uno con textos que no son cortos, pero que es posible leerlos con un poco de paciencia, sin embargo hacerlo frente a una pantalla puede ser más incómodo.

El Malpensante es una revista no apta para ortodoxos ni para fundamentalistas, no es apta para radicales de izquierda y mucho menos para los de derecha, no es apta para “apolíticos” ni indiferentes. Pienso que su nombre parte del hecho de que la mayoría de la sociedad, aún doble moralista y conservadora puede calificar mal (¿o descalificar?) lo publicado por ir en contra de las corrientes hegemónicas, el titulo entonces obedece no a un sentimiento de ilegitimidad sino por el contrario al orgullo de disentir y pensar distinto, característica que debería ser considerada una fortaleza y no una amenaza dentro de las sociedades democráticas.

El Malpensante es una revista para “librepensantes”, para librepensadores que han dejado atrás el conformismo que tanto aletarga a nuestra sociedad, y que con ciertos criterios y argumentos se atreven a criticar de manera original, profesional y exquisita en algunos casos, lo que para ellos no esta bien o por lo menos podría estar mejor.

Que quede claro entonces mi simpatía con esta publicación y mi recomendación de ella para cualquiera que quiera atreverse a pensar y a abrir su mente si aún no lo ha hecho.